Aún recuerdo hace muchísimo tiempo, (creo que allá por el 85) cuando me enganché al programa radiofónico que conducía este buen hombre en la desaparecida emisora Antena 3. Recuerdo que tras el programa Supergarcía, otro clásico, la sintonía del programa despejaba cualquier atisbo de somnolencia. Se llamaba Polvo de Estrellas y hasta la fecha no he encontrado un programa radiofónico que me tuviera tan despierto como aquel. Tambien recuerdo como lo oía a escondidas de mis padres, que preferían que su pequeño de 10-11 años, descansara para ir al colegio al día siguiente, en lugar de estar despierto hasta altas horas de la madrugada (en sus comienzos duraba media hora escasa, pero llegó a alcanzar las tres horas de duración).
Carlos Pumares siempre comenzaba en un tono amistoso y terminaba totalmente desatado cuando algún radioyente con mala leche criticaba a directores de la talla de John Ford o Frank Capra, a los que siempre defendía a capa y espada. Aún se me descuelga una sonrisa recordando aquellas noches en las que se volvía una auténtica bestia intentando explicar a los radioyentes que demonios era el Monolito de 2001: Una Odisea en el Espacio.
Tras esta etapa le perdí un poco la pista hasta que apareció de "contertulio" en algunos programas del afortunadamente desaparecido Crónicas Marcianas, haciendo una parodia de si mismo.
Con todo ello quiero decir que posíblemente no sea el crítico de cine más riguroso del mundo, que puede que simplemente haya visto mucho cine y tenga una forma peculiar de expresarlo, pero para mi fue el comienzo de todo. Gracias a aquel maravilloso programa, a una edad temprana conocí grandes películas, me reí un montón y lo más importante, aprendí a amar el cine.
Es por ello que cada vez que leo un comentario indicando lo mal crítico que es, no puedo evitar recordar los buenos tiempos que me hizo pasar y la cantidad de anécdotas y curiosidades que escuché de su boca relacionadas con el mundo del cine. Sinceramente no creo que sea un mal crítico, pues pienso que no hay malos críticos sino críticas que chocan radicalmente con nuestras opiniones. Puedes estar o no de acuerdo con un crítico pero no por ello es mejor o peor crítico.
Como colofón, dejo unos vídeos que han ido apareciendo en su blog, que visito asiduamente, en los que se puede vislumbrar un poco de lo que queda de aquellos buenos tiempos.
Ang Lee, ovejeros gays y la escena de sexo explícito en Lust, Caution.
Bruce Willis. El más grande.
En fin, vaya este post en homenaje a este hombre, que curiosamente era licenciado en física y que tantos buenos momentos me hizo pasar.
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Escuchando: The Band - The Weight
via FoxyTunes
Carlos Pumares siempre comenzaba en un tono amistoso y terminaba totalmente desatado cuando algún radioyente con mala leche criticaba a directores de la talla de John Ford o Frank Capra, a los que siempre defendía a capa y espada. Aún se me descuelga una sonrisa recordando aquellas noches en las que se volvía una auténtica bestia intentando explicar a los radioyentes que demonios era el Monolito de 2001: Una Odisea en el Espacio.
Tras esta etapa le perdí un poco la pista hasta que apareció de "contertulio" en algunos programas del afortunadamente desaparecido Crónicas Marcianas, haciendo una parodia de si mismo.
Con todo ello quiero decir que posíblemente no sea el crítico de cine más riguroso del mundo, que puede que simplemente haya visto mucho cine y tenga una forma peculiar de expresarlo, pero para mi fue el comienzo de todo. Gracias a aquel maravilloso programa, a una edad temprana conocí grandes películas, me reí un montón y lo más importante, aprendí a amar el cine.
Es por ello que cada vez que leo un comentario indicando lo mal crítico que es, no puedo evitar recordar los buenos tiempos que me hizo pasar y la cantidad de anécdotas y curiosidades que escuché de su boca relacionadas con el mundo del cine. Sinceramente no creo que sea un mal crítico, pues pienso que no hay malos críticos sino críticas que chocan radicalmente con nuestras opiniones. Puedes estar o no de acuerdo con un crítico pero no por ello es mejor o peor crítico.
Como colofón, dejo unos vídeos que han ido apareciendo en su blog, que visito asiduamente, en los que se puede vislumbrar un poco de lo que queda de aquellos buenos tiempos.
Ang Lee, ovejeros gays y la escena de sexo explícito en Lust, Caution.
Bruce Willis. El más grande.
En fin, vaya este post en homenaje a este hombre, que curiosamente era licenciado en física y que tantos buenos momentos me hizo pasar.
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Escuchando: The Band - The Weight
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